El sector agropecuario es responsable de producir alimentos para una creciente población mundial, pero es altamente vulnerable a la crisis climática, razón que ha impulsado el uso de agroquímicos para enfrentar plagas y enfermedades. Por tanto, producir más alimentos incrementa su uso.
Chile es uno de los países que más aplica estos productos (el doble del promedio OCDE), sin embargo, su uso tiene consecuencias negativas para la salud humana, los trabajadores agrícolas y el medio ambiente. Considerando lo anterior, se hace urgente reducir el uso de agroquímicos, y para ello proponemos orientar estratégicamente la innovación agrícola hacia el desarrollo de bioinsumos: productos de origen biológico utilizados para mejorar la fertilidad del suelo, la salud de las plantas y el control de plagas y enfermedades.
Como parte de la estrategia del Gobierno, se crea el Centro Nacional de Bioinsumos a través del MINAGRI y el INIA, para acelerar el desarrollo y transferencia de tecnologías sosteniblesal sector productivo, que coordinará el escalamiento de bioinsumos INIA en envases para predios medianos y pequeños, uso doméstico y jardines urbanos.
Estos, han sido aplicados en frutales como avellano, cerezos, arándanos, frutilla, frambuesa y vides; hortalizas como lechuga, tomate, pepino y ají; y en menor grado en cereales, con muy buenos resultados. En el corto plazo se espera triplicar la producción actual de dosis y licenciar su producción a cooperativas y empresas, lo que permitiría cubrir una superficie estimada de 85 mil ha agrícolas, reduciendo la huella de agroquímicos nacional en cerca de un 14%.
Se estima que este mercado podría crecer de US$3.300 millones en 2020 a US$7.400 millones en 2027 a nivel mundial, mercado que es cada vez más exigente en términos de inocuidad y sostenibilidad. Para insertarnos se requiere de incentivos y de una fuerte colaboración e inversión público-privada, incluyendo al sector agroexportador.
Grupo DiarioSur, una plataforma informativa de Global Channel SPA. Powered by Global Channel